Lo que lleva a darse cuenta que para una Pyme o una Empresa Familiar, es sumamente importante en estos contextos de crisis dejar de vivir atendiendo lo urgente…corriendo de acá para allá…tratando de “apagar incendios”, ya que esta situación lleva a sus miembros a un estado de cansancio y pérdida de energía y entusiasmo, tanto dentro como fuera de la empresa.
Es así que las empresas se vuelven ineficientes, pierden la capacidad de mantener el foco en el valor agregado que caracteriza a sus productos y/o servicios, en consolidarse, en desarrollarse de manera sustentable, como siempre decimos: no generan el impacto positivo esperado en la sociedad receptora, en sus equipos de trabajo y en el medio ambiente.
Muchas veces el fundador de la empresa tiene claro, en su cabeza, el horizonte, la meta a lograr, pero el día a día le hace perder ese enfoque, el plan que ideó, la expectativa que albergó y que motivó a emprender la empresa, a alcanzar sus sueños.
Es importante identificar esta realidad de la empresa porque cuando todo es urgente, es porque no hemos trazado un rumbo bien definido, no planteamos una estrategia basada en la realidad, no hemos planificado los pasos que vamos a dar hasta la meta.
Y… entonces frente a esta situación nos planteamos… Cómo supero esta crisis? ¿Qué hago para salir adelante? ¿Qué herramientas tengo para lograr traccionar? ¿Cómo puedo mejorar?…
Aunque parezca y sientas a esta altura que estás sumido en la tristeza de abandonar tus sueños, tu legado, la fuente de trabajo de la familia…
Hay solución, y tiene una respuesta muy simple… ORGANIZACIÓN!
Sí, esencialmente, con una buena organización, podes dar respuestas a todos estos interrogantes, es decir, planteando objetivos claros a corto y mediano plazo, trazar una planificación a largo plazo, lo que va a redundar en el crecimiento, sostenimiento, sustentabilidad y proyección de tu empresa en el futuro.
La acción de plantear objetivos, el empresario muchas veces considera que es algo difícil o complejo e insostenible por la vorágine de nuestro país, de la economía y las reglas de juego. Pero es SIMPLE… los invito a preguntarse: ¿Qué quiero conseguir?, ¿Cómo quiero ver dentro de unos años a mi empresa?, ¿a qué escala quiero que esté mi empresa?, ¿Cómo quiero que reconozcan a mi empresa en mi comunidad?, ¿Quiero trascender de ella?, ¿Qué valores aporto/transmito a la sociedad?
Y la respuesta es también SIMPLE…
Te invito a experimentarla y a realizar una Planificación Estratégica… ¿Por qué?
Porque tener una Planificación Estratégica, nos lleva a poder instrumentar el siguiente paso, el “Plan Operativo” que es el que nos permite concretar las acciones y prácticas para conseguir los objetivos, asignando actividades, recursos, tiempos, y así poder medir los resultados esperados.
Es esta ORGANIZACIÓN interna de la Empresa, la que va a llevar a que las Pymes y Empresas Familiares sean más eficientes, obteniendo un buen clima laboral, la responsabilidad de todos los involucrados para con la empresa, el apoyo a la sustentabilidad de sus servicios y/o productos y el compromiso con el medio ambiente… proyectarse al futuro con buena salud empresarial.
