La prevención laboral debe apuntar a promover y mantener el más alto grado de bienestar físico y mental de los trabajadores.
En la actualidad, los accidentes de trabajo y las enfermedades profesionales son el producto de una falla de los sistemas de prevención o bien, de la inexistencia de estos.
Por ello aplicando una planificación de prevención laboral se accede a los procedimientos que permiten eliminar o limitar a su mínima expresión los riesgos del trabajo.
La prevención laboral tendrá como lineamientos:
- Privilegiar los aspectos preventivos por sobre la protección.
- La evaluación de los procesos en la empresa, que implica un reconocimiento de los peligros y riesgos presentes en los sectores y puestos de trabajo.
- La eliminación de los peligros y riesgos detectados en la evaluación.
- La aislación de aquellos riesgos y peligros que no hayan podido ser anulados.
- Los controles periódicos, a fin de monitorear y continuar trabajando en las mejoras necesarias.
- La capacitación y formación continua de los y las trabajadores/as sobre sus puestos de trabajo y los riesgos a los que están expuestos.
Las organizaciones, instituciones y empleadores, deben promover el desarrollo de una cultura de la prevención, la cual comprende los valores, reglas y principios que fomenten ambientes de trabajo seguros y saludables, minimizando los riesgos y peligros en el mayor grado posible.
Los beneficios que la prevención de riesgos laborales aporta a su empresa son innumerables, y entre ellos podemos mencionar:
- Mejoramiento de la salud de los empleados,
- Reducción de los costos para la empresa y la administración,
- Enriquecimiento de la relación empresa-trabajador.
Además, la prevención laboral facilita la gestión de recursos humanos, aumenta la rentabilidad general de la empresa y permite cumplimentar con la normativa vigente de las organizaciones.
Dr. Alan Flores